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En la foto: mamá y yo. |
¡Perfección!
Así es como me gusta llamarte,
así es como te ve mi inquieto corazón
cuando vienes a mí con tu rostro sereno
esbozando una sonrisa acogedora
y cuando entre abrazos y bendiciones
me devuelves la paz.
Te conozco, Perfección
desde el misterio adormecido de tu vientre,
pupila de sol dilatada
que abriga -hoy más que nunca-
con voz silente, mi opaca soledad,
así como la mañana cálida a la tenue neblina.
Te llamo Perfección
porque en el ocaso de tus ojos rutilantes
reposa la mansa caricia del amor,
y porque es en tus manos celestiales
donde nacen los sueños que quiero alcanzar.
Al hálito de mi alma: mi madre.
Con todo mi amor.
© Lissette Flores López. Derechos Reservados.
8 comentarios:
Tus poemas siempre hablan del amor, en cualquiera de sus variedades; en este caso, del amor filial. Me ha encantado este verso:
"desde el misterio adormecido de tu vientre"
Y es que el sustantivo "vientre" y el adjetivo "adormecido" están entre mis preferidos.
Tu madre estará orgullosa de una hija que la quiere tanto, hasta el punto de llamarla "Perfección".
Un fuerte abrazo, Liz.
Qué bello comentario, Óscar. Me ha llenado el corazón. Gracias, querido poeta. Un abrazo.
... Y además cocina bien!!!
Saludos a tu mami.
Me gusta que hagas tiempo para escribir. Siempre.
Abrazos. A las dos.
hummm sí, más que bien, la sazón de mami es... ¡ay dio'mio! jeje
Gracias compi, yo le doy tus saludos a mi mamá.
Un abrazo.
Perfección! Qué dulce y entregado, el amor de madre es perfecto, sí, muchas veces las palabras son insuficientes para expresarlo, pero perfección le calza bastante bien.
La estrofa final me ha gustado mucho:
'Te llamo Perfección
porque en el ocaso de tus ojos rutilantes
reposa la mansa caricia del amor,
y porque es en tus manos celestiales
donde nacen los sueños que quiero alcanzar.'
Tu madre debe estar muy orgullosa de ti.
Un gran abrazo.
Cierto querida Marisol, no hay palabra que describa a una madre, perfección es la que se le aproxima. Gracias por posar tu atención en esa estrofa, me agradó pensarla así. A que tu madre también está orgullosa de ti, eres una buena niña.
Un abrazo.
Liz, no me mates, pasé por este poema cuando lo publicaste, estoy segura que dejé mi comentario, pero seguro que no fue así, al darle al código lo haría mal y no me di cuenta,
es que recuerdo que te achuché los mofletillos a besines, jeje y también decía que tu madre era muy guapa, así su hija.. vaya, que me da rabia que pienses que me resultó indiferente este poema tuyo, te pido disculpas por mi error, es un homenaje hermoso a tu mamá, un besazo a ambas..
Anda Isa, que en ningún momento me pasó por la mente pensar algo así, y mucho menos de ti. Si tú al igual que Marisol y Óscar me han acompañado desde que inicié el blog, siento su compañía comenten o no. Además yo no he sido constante con ustedes y aún así siempre vienen a mis letras ¡vaya! ¿y tú pides disculpas? no querida Isabel, que sepas en mi corazón sólo hay agradecimiento y cariño hacia cada una de las personas que vienen a este espacio donde dejo un pedacito de mí. Jamás pensaría mal.
Muy lindas tus palabras, claro que viniendo de una mami que a los ojos de sus hijos seguro es igual de perfecta que la mía, no me extrañan que vengan arropadas de ternura y dulzura.
Un gran abrazo, estimada Poeta.
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